El pasado 22 de enero fue un día especial para nuestra comunidad educativa: celebramos el día del padre Guillermo José Chaminade, fundador de la Familia Marianista, con una jornada repleta de actividades, y, cómo no, el clásico chocolate caliente que endulzó la mañana.
Desde primera hora, recordamos la vida y legado del padre Chaminade. Su valentía y dedicación en tiempos complicados como la Revolución francesa, así como su fe en María, nos inspiraron para reflexionar sobre cómo todos podemos ser “misioneros” en nuestro día a día. Fue también un momento para redescubrir su enseñanza más esencial: “Lo esencial es lo interior”.
Por supuesto, no faltaron las celebraciones que nos unieron como comunidad. Los mayores del colegio se encargaron de repartir el chocolate por las clases de Infantil, y ese aroma inconfundible que solo el chocolate puede ofrecer. Mientras tanto, en el polideportivo, todos disfrutamos de ese chocolate tan especial que prepararon Juan y nuestro equipo de cocina, ¡muchas gracias por tanto cariño!
La jornada no terminó ahí. Por la tarde, el espíritu deportivo y el trabajo en equipo tomaron el relevo con competiciones en honor al padre Chaminade. Un broche de oro perfecto para un día lleno de aprendizajes, diversión y comunidad.