De Palas de Rei a Arzúa: 28,8 km
39,1 km a Santiago
La travesía
Saltamontes llegó a un charco de agua que había en el camino. Estaba a punto de saltar el charco.
–¡Espera! – grito una vocecita. Saltamontes miró hacia abajo. En el borde del charco había un mosquito. Estaba sentado en una barquita.
–Es una norma –dijo el mosquito–. Tienes que usar esta barca para cruzar el lago.
–Pero, señor –dijo Saltamontes-, para mí es muy fácil saltar al otro lado.
— Las normas son las normas –dijo el mosquito-. Sube a mi barca.
–Tu barca es demasiado pequeña para mí – dijo Saltamontes.
— Las normas son las normas –dijo el mosquito–. ¡Tienes que montar en mi barca!
— No quepo en tu barca – dijo Saltamontes.
–¡Las normas son las normas, a pesar de todo! – gritó el mosquito.
–Bueno – dijo Saltamontes–, entonces solo me queda una cosa que hacer. Saltamontes cogió la barca.
–¡Todos a bordo ¡–gritó el mosquito. Saltamontes alzó la barca con mucho cuidado. Se metió en el charco.
–Tienes suerte por hacer conmigo esta travesía –dijo el mosquito. He estado navegando de un lado a otro de este lago durante muchos años – añadió el mosquito-. No me asustan las tormentas ni las olas.
Saltamontes dio otro paso.
–Sé más de navegación que cualquiera de por aquí. –dijo el mosquito. Saltamontes dio un paso más. Llegó al otro lado del charco y dejó la barca en el agua.
–Ha sido un buen viaje –dijo el mosquito-. Ahora tengo que volver rápido a la otra orilla para esperar nuevos viajeros.
¡Gracias! –dijo Saltamontes-. ¡Muchas gracias por haberme cruzado el lago sano y salvo!
–¡Fue un placer! –dijo el mosquito. Saltamontes le dijo adiós con la mano y continuó andando camino adelante.
- ¿Qué actitudes de nuestra sociedad o de nuestro entorno nos recuerda esta historia
- ¿Cuánta importancia das a las normas en tu vida?
- ¿Te sientes cómodo cuando algo se rige por las normas?
- ¿Puede convertirse en un problema el cumplimiento de las normas sin excepciones?
- ¿Qué normas consideras absurdas?
Este es mi mandamiento: “Que os améis unos a otros, como yo os he amado”. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.
Jn 12-13
Te pedimos, Dios Padre, que sepamos descubrir
lo que de bueno tienen las normas.
Que no nos dejemos atrapar en el mero cumplimiento
de las normas.
Te pedimos descubrir cuál es el mandamiento auténticamente
importante.
Te pedimos que este Camino que hoy comenzamos nos
ayude a conocernos mejor a nosotros mismos, a los compañeros
y también a Ti.